Te propongo un plan al que no te podrás resistir.
Conocer el comercio más antiguo y con más historia de la ciudad.
"Muebles Huebra" data de 1836, fue inaugurada por Don Rafael González de la Huebra como tienda alquilada en San Pablo 2 y 4, donde se suministraban provisiones básicas como comestibles, chocolate, clavos, tenazas, tornillos a salmantinos y gente de todas las provincias cercanas.
La extensa familia Huebra fueron grandes trabajadores e inversores consiguiendo tener cada uno sus propios negocios.
Rafael tenía claro que quería dedicarse al comercio, este se empeñó en elevar la calidad del producto de su negocio y poco a poco fue incluyendo artículos de ultramarinos e introdujo artículos importados. Y despacharía mechas, pantallas, sartenes, molinillos, relojes, cerrojos, cerraduras, velas y un sinfín de objetos muy necesarios en aquellos tiempos.
Empezó adquirir artículos de lujo que tenían salida entre los clientes más adinerados, a ellos, les servía camas de forja, artículos de lujo dorados, estufillas… Salamanca se empieza a interesar por la decoración refinada y comienza el interés por el mueble de calidad.
Rafael consigue en sus 50 años de profesión en el negocio multiplicar por veinte su capital inicial.
El 12 de octubre de 1860, Don Rafael G. de la Huebra adquiere la propiedad de la C / San Pablo,2 y el 30 de noviembre de 1866 compra el segundo local de su comercio.
A su muerte, el negocio pasa a manos de su hijo Luis que tiene en sus manos la labor de seguir con un negocio muy productivo y ya con una identificación de la familia en el mundo de las artes.
Don Luis fue parte activa de la vida de la Sociedad salmantina de la época y participe en la construcción de la Plaza de Toros de la ciudad y en los diferentes eventos celebrados en la Plaza Mayor.
Sin duda, a Don Luis, le marcó su asistencia en 1878 a la Exposición Universal de París, de ahí los negocios de Huebra se verían influenciados al ver tanta maravilla como eran los papeles pintados, estufas de hierro, cristalerías de Baccarat o Sèvres, flores artificiales, muebles de hierro fundido que pronto podrían se vistos en los escaparates del negocio.
Comienza la revolución por el interés de un comercio novedoso y la compra de productos a los mejores proveedores del momento nacional e internacional, iniciándose así la cultura del consumo.
En 1880 los “Grandes Almacenes de Novedades” de los Huebra, dan entrada al mundo de la fotografía con cámaras, papeles y productos químicos así sus clientes verían satisfechos sus gustos fotográficos.
En sus últimos años de vida Don Luis deja en manos de sus hijas el negocio. Con la muerte en 1922 la familia había adoptado una nueva trayectoria del negocio.
El hijo menor de Don Rafael nacido en 1908, será participe del comercio y será el responsable de las compras, de custodiar el archivo familiar, las cartas de su padre, las facturas, la correspondencia y contabilidad.
Con la llegada de la nueva generación se contribuyen alborear la modernidad en Salamanca.
Don Rafael y sus hermanas consiguen el prestigio deseado por toda la familia durante tantas décadas.
Una vez que Rafael y sus hermanas fallecen, el negocio es dirigido por Pepe, Eduardo y Nacho Huebra, llevan en el 44 años, es un local lleno de sentimientos, con una estética maravillosa. Rodeado de muebles, iluminación, complementos que aportan ese toque de distinción a cualquier hogar.
Los 3 hermanos Pepe, Eduardo y Nacho con una atención impecable al cliente, hacen que el negocio familiar sea la 4ª generación al frente de Muebles Huebra, queda pendiente y en duda que la 5ª generación prosiga con la saga familiar, una maravillosa andadura que en época de pandemia está pasando por momentos delicados, aquí os dejo una de las joyas del comercio de nuestra ciudad, un comercio que bien vale una visita tanto de salmantinos como visitantes a la ciudad , un lugar donde encontrar esa pieza fantástica y singular que en otro lugar no podrás encontrar por ser casi piezas exclusivas que se convierten a día de hoy en decoraciones especiales para casas, despachos, locales con encanto.
A “Muebles Huebra” sólo puedo desear que sigan cosechando el mismo éxito que tuvieron en los 80 y 90 y el de sus antecesores. Muchas gracias a la familia Huebra por su amistad, profesionalidad y gusto exquisito en todas sus decoraciones.
Reportaje realizado por: Begoña Luis
Muebles Huebra